La consultora Exante divulgó este jueves nuevos resultados de su encuesta de expectativas empresariales, que en esta oportunidad consultó a 305 gerentes y altos ejecutivos de empresas grandes y medianas que operan en Uruguay.
Esta vez el relevamiento se enmarcó en un clima pautado por la incertidumbre de un escenario abierto de cara a las elecciones nacionales y con un plebiscito que podía introducir cambios sustanciales en el sistema de seguridad social.
Los resultados de la encuesta realizada entre el 1° de octubre y el 26 de octubre mostraron en varias dimensiones un deterioro de las respuestas en comparación al relevamiento anterior (abril de 2024), aunque los movimientos fueron poco marcados o más bien hacia evaluaciones “neutras” y no necesariamente negativas. A su vez, en varios frentes la percepción de los ejecutivos sigue siendo "sumamente positiva", destaca.
Según Exante, esto es consistente con que, si bien las elecciones son eventos políticos de relevancia, los cambios de gobierno en Uruguay desde el retorno a la democracia han implicado generalmente la continuidad de los principales lineamientos de la política macroeconómica. Tampoco han provocado grandes movimientos en las variables financieras.
Coyuntura económica y clima de inversiones en Uruguay
El informe al que accedió El Observador indica que las expectativas sobre la situación económica y el clima de inversiones son las que mostraron deteriores apreciables comparado con ediciones anteriores.
Por ejemplo, la proporción de quienes consideran que la economía está mejor que un año atrás bajó de 46% en abril a 38% en el último relevamiento, y la de respuestas anticipando una mejor situación económica el año próximo pasó de 39% a 22%.
A su vez, solo 13% de los respondientes prevé una mejora en el clima de inversiones dentro de un año, dejando de hecho un saldo neto de respuestas negativo (lo cual no sucedía desde 2019).
De todas maneras, la evaluación del clima de negocios sigue siendo positiva para la gran mayoría de los altos ejecutivos. Nueve de cada diez (89%) sigue calificándolo como "bueno" o "muy bueno“. Este porcentaje es igual que el máximo registrado en 2022 y a inicios de 2023, destaca Exante.
Expectativas sobre tipo de cambio e inflación
La mayoría de los ejecutivos consultados indicó que espera un tipo de cambio a $ 43,1 en el horizonte de un año, según el promedio de respuestas, más de 6% por encima de lo que proyectaban en abril pasado. Esta nueva estimación está en línea con el aumento que ha tenido el precio del dólar en el segundo semestre, principalmente setiembre.
También se constata un ajuste al alza en las expectativas de inflación, pese a que este indicador (5% interanual a octubre) lleva casi un año y medio dentro del rango meta fijado por el Banco Central (entre 3% y 6%).
En promedio, la inflación esperada por los empresarios para el año próximo se sitúa en 6,1%, levemente por encima del 5,8% registrado en abril.
Para un horizonte de tres a cuatro años permanece muy recostada sobre el techo del rango meta. En ese sentido, un 42% de las respuestas sitúa la inflación en ese plazo por encima del techo de la meta. Esto indica que las expectativas aún no están plenamente ancladas al objetivo oficial de inflación, explica Exante.
Situación y perspectivas para las empresas en Uruguay
Las expectativas sobre el desempeño de las propias empresas también tuvieron un deterioro con relación a abril, aunque menos intenso que para la situación económica general.
De hecho, un 51% de los consultados percibe que su empresa está en una mejor posición general que hace un año atrás y solo 7 % piensa que está peor (el porcentaje más bajo desde fines de 2011).
En tanto, un 44% espera una mejora de la situación general de su empresa durante los próximos 12 meses.
A su vez, casi la mitad de los empresarios sigue previendo un aumento de la producción de su empresa en el próximo año y un 45% aguarda un incremento en su inversión. Aunque también se percibe una moderación en las respuestas sobre estos ítems, en los dos casos el balance sigue siendo mejor que el que prevalecía previo a la pandemia.
Además, el 69% de los ejecutivos evalúa la rentabilidad de su empresa como “buena” o “muy buena”, y el 37% espera un aumento de la rentabilidad en 2025. Sin embargo, sigue habiendo preocupación por la presión de costos, siendo ése el elemento más mencionado (59%) cuando se consulta por los principales desafíos que enfrentan las empresas, destaca la consultora.
¿Cómo evalúan la gestión de gobierno de Luis Lacalle Pou?
Según la encuesta, la aprobación del gobierno de Lacalle Pou se ubicó en un 85%, solo unos puntos por debajo de los máximos registrados durante la pandemia.
Cuando se desglosa la gestión por áreas, la mayoría de los encuestados valoró positivamente aspectos como el manejo de la inflación, el desarrollo de infraestructura, la promoción de inversiones, el desempleo, el crecimiento económico y la situación fiscal.
Sin embargo, áreas como la educación, la evolución de la pobreza, la competitividad internacional y la seguridad pública siguen siendo las peores valoradas (aunque solo la última con un balance neto de respuestas negativo).
Por otro lado, al igual que en relevamientos anteriores, las áreas no económicas aparecen como las principales prioridades que los ejecutivos consideran esenciales para el próximo gobierno, y se señala particularmente la necesidad de mejora de la educación y la seguridad pública.
Aun así, el 96% de los que respondieron cree que el próximo gobierno debería “mantener el rumbo” o “hacer algunos ajustes”. En el ciclo electoral de 2019 predominaba entre el empresariado la noción de que se necesitaba “hacer muchos ajustes” o “cambiar el rumbo”.